Las clases virtuales, las tareas y el tiempo de ocio han ocasionado que los menores de edad pasen mucho más tiempo en los dispositvos electrónicos y navegando en internet. Si bien, pueden accedera una gran cantidad de información para su educación, también están expuestos a a contenido peligroso.

“Si bien, internet ha sido clave para la teleeducación en tiempos de pandemia, el acceso a las miles de posibilidades que permite, tales como: visualización de vídeos de todo tipo, recorridos virtuales, juegos en línea, libros digitales, bibliotecas virtuales, entre otros… exige tener un mayor control sobre su uso, sobre todo para los más pequeños de la casa. Sin querer podrían terminar en un sitio con contenido para adultos, ingresar información personal para favorecer un ataque cibernético, entre otros peligros”, explica John Holguin, experto de HughesNet.

Internet es un mundo prácticamente sin fronteras, donde se puede acceder a cualquier información o herramienta, y por ello es importante que los padres esten atentos de cuáles son los riesgos que tiene Internet para los menores, y cómo controlar lo que consumen.

En Ecuador, solo el 37 por ciento de los hogares tiene acceso a internet, esto de acuerdo a datos de la UNICEF. Además, el sitio especializado de ciberseguridad Gaptain explica que todos los días millones de niños están expuestos a violencia física y sexual, pederastas, comunidades que promueven los desórdenes alimenticios, pensamientos extremistas, retos virales peligrosos.

Recomendaciones para el uso seguro de internet:

• Filtrar y bloquear contenido violento o pornográfico: Este proceso es fácil de realizar, ya que en los buscadores (Google Chrome, Firefox, Kiddle) existen opciones para elegir la información permitida para búsquedas. Por ejemplo, en la configuración de Google Chrome se debe seleccionar “aplicar controles de filtro” y activar el ítem “permitir solo algunos sitios”.
• Actualización de navegadores y software: Las actualizaciones para navegadores o sistemas operativos tienen parches de seguridad que pueden evitar daños, por lo que aceptar las actualizaciones es lo mejor, ya que incluyen el mantenimiento actualizado de antivirus y firewalls.
• Establecer límites de tiempo de uso: Para menores de dos años, lo más recomendable es establecer el uso ocasional de pantallas con acompañamiento de sus padres en horas adecuadas. De dos a cinco años, fijar un máximo de una hora al día y; de cinco años en adelante (hasta la adolescencia), lo ideal es no exceder las 4 horas, sin contar con el tiempo de clases virtuales.
• Monitoreo de redes sociales: En muchos casos, el contenido peligroso puede encontrarse directamente en las redes sociales de los niños.
• Establecer perfiles para cada usuario: Otra alternativa es crear cuentas para cada usuario del computador, con el fin de establecer el acceso a contenido determinado para cada uno. Se debe configurar el control parental en los buscadores de cada perfil.

Además, existen otras herramientas prácticas para controlar o bloquear el acceso a contenidos. 

• Control web: Este tipo de herramientas permiten limitar las páginas web a las cuales acceden los niños. La forma más sencilla es habilitando “Google SafeSearch” en cualquier navegador que usen.
• Acceso a aplicaciones: Limitar el acceso a Google Play o App Store evitará que los niños accedan a apps indebidas e incluso evitará que realicen algún tipo de compra online.
• Geolocalización: Actualmente los celulares y computadoras permiten tener acceso a la ubicación del dispositivo en tiempo real, esta herramienta ayuda a conocer el lugar exacto de la persona y se puede usar como una medida de seguridad preventiva.
• Google Family Link: Es una aplicación gratuita que permite conocer la información que ven los niños en internet y en sus dispositivos.
  Windows Live Family Safety: Es gratuita y viene incluida en todos los dispositivos Windows, de igual manera permite verificar el contenido al cual están expuestos los niños.